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Dan revés al sueño de millones: maximizar los beneficios de su crédito Infonavit

By 6 octubre, 2021octubre 19th, 2021Noticias

La familia Zaga Tawil ha sido víctima de persecución política y judicial, pese a haber establecido un acuerdo completamente legal y válido entre su empresa, Telra Realty, con el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit), cuyo propósito era maximizar los beneficios del crédito de millones de derechohabientes.

El convenio, celebrado en 2014, contemplaba la creación, desarrollo e impulso de un programa para reparar, remodelar y mejorar viviendas abandonadas, las cuales serían ocupadas por los beneficiarios, el cual también incorporaba planes de comercialización para el arrendamiento de vivienda, con opción a compra o permuta.

Fue durante la administración de David Penchyna Grub al frente del Infonavit cuando se determinó cancelar los contratos con Telra Realty, la cual fue notificada sobre esta decisión el 8 de junio de 2017. Pese a manifestar su inconformidad por estos hechos, al considerarlos arbitrarios e injustificados, la compañía aceptó negociar las diferencias, lo que dio pie a un proceso de indemnización en su favor, en el cual el instituto de vivienda se comprometía a pagarle 4,800 millones de pesos más IVA por daños y perjuicios en 6 exhibiciones mensuales.

Tras poner punto final a esta historia, la familia Zaga tomó la decisión de diversificar sus inversiones, para lo cual dispuso -a través de Telra- de 1,000 millones de pesos que entregó a los hermanos El-Mann, con la finalidad de invertir en un portafolio inmobiliario en Estados Unidos. Al día de hoy se desconoce el destino de los recursos, por lo cual Telra determinó investigar su paradero.

Pero poco después, la familia Zaga y su compañía fueron blanco de calumnias, al supuestamente haber defraudado al Infonavit y quedarse con dinero del Estado. Esta versión está totalmente alejada de la realidad, ya que los Zaga siempre se han conducido con apego a la legalidad. La indemnización que recibieron fue aprobada de forma unánime por el Consejo de Administración del Infonavit.

Incluso, en la carpeta de investigación abierta con motivo de la denuncia formulada por el Infonavit, el Ministerio Público, determinó el no ejercicio de acción penal por uso ilícito de atribución de funciones por la suscripción de los acuerdos entre Infonavit y Telra Realty.

Ahora bien, aun cuando los hermanos El-Mann nunca estuvieron involucrados en el acuerdo de colaboración de Telra con el Infonavit, aseguraron que pagarían 2,000 millones de pesos a manera de acuerdo reparatorio con el instituto, de los cuales manifestaron que 1,000 millones provenían de los recursos que Telra les entregó.

El 10 de febrero de 2020, durante su conferencia matutina, el Fiscal General de la República le presentó al Presidente un cheque por 2,000 millones el cual fue posteriormente entregado al Instituto para Devolverle al Pueblo lo Robado (Indep), e informado que fue derivado del “Asunto Infonavit”, como se refieren los medios a esta serie de eventos desafortunados.

Con los reporteros como “testigos”, el fiscal también aprovechó para anunciar que el caso se inició gracias a una denuncia de la Consejería Jurídica de Presidencia ante la FGR, con la esperanza de tener más reparaciones, lo cual resultó falso, pues hasta donde se tiene conocimiento no existe dicha acusación, solo una que fue iniciada por el Infonavit.

Aun cuando ese mismo día se exhibió el supuesto cheque, no fue sino hasta horas después cuando los El-Mann entregaron al gobierno federal dos cheques por 1,000 millones de pesos cada uno, de forma que el que se mostró a la prensa no tenía fondos.

El 17 de febrero del año pasado, la FGR lo envió al Indep a manera de “depósito”, hasta que se resolviera la investigación iniciada por parte del Infonavit en contra de quien resultara responsable por la probable comisión del delito de uso ilícito de atribuciones y facultades, de acuerdo con el Código Penal Federal.

Así se ejecutó este montaje, con el que supuestamente se pretendía resarcir un quebranto por el que los Zaga fueron señalados, cuando en realidad lo único que hicieron fue recibir la indemnización por el incumplimiento de un acuerdo previamente estipulado.

Tampoco está claro el motivo por el que se presentaron dos cheques en lugar de uno. Lo que sí sabemos es que la reputación es un activo de gran valor para esta familia, que no escatimará esfuerzos para limpiar su nombre y revelar los hechos que han ensombrecido esta negociación.